lunes, 14 de enero de 2013

El embarazo y la alimentación

Es sabido que los cambios que se producen en el organismo de una mujer embarazada son muchos e importantes. Por este motivo, es indispensable acompañar estos cambios con una ingesta adecuada de nutrientes.

Esto no significa que se deba duplicar la cantidad de comida ingerida sino que se debe ser minucioso a la hora de seleccionar los alimentos para obtener los nutrientes requeridos.

La alimentación equilibrada y variada es importantísima no sólo para el bienestar de la futura madre sino también para el desarrollo fetal.

Consejos básicos para la nutrición de una mujer embarazada:
- Evitar consumir alimentos fritos, inclinarse por los hervidos, los cocinados a la plancha, al horno o al vapor.

- Evitar el consumo de carnes con gran cantidad de grasa.

- No abusar del aceite ni de las especias.



- Consumir alimentos frescos.

- Beber abundante agua, como mínimo 2 litros por día. Con esto se disminuye la sensación de nauseas, la constipación y previene las infecciones urinarias.

- Disminuir el consumo de sal para evitar la retención de líquidos.

- Evitar los alimentos de pastelería.

- No beber nunca alcohol.